miércoles, 16 de septiembre de 2009

La explicación es fenomenal, no hay nada que pueda contraargumentar de esta presentación. Sobre el método Kabbalah no puedo decir nada ya que nunca he asistido a alguna práctica ni clase de ningún tipo. 

viernes, 4 de septiembre de 2009

Las cuatro bandas cerebrales de mayor a menor frecuencia:

ONDAS BETA 

Las ondas beta presentan una amplitud baja y una frecuencia alta que oscila entre 13.0 y 30.0 cps (ciclos por segundo). Se emiten profusamente durante el estado de vigilia, y están relacionadas con el nivel de consciencia externo y la actitud de extroversión. Las ondas beta predominan cuando se realiza algún trabajo físico o mental, aunque, si estas tareas son fáciles, también pueden realizarse durante loa emisión de las ondas alfa. El análisis intelectual y la percepción a través de los cinco sentidos se realiza en el nivel beta. La cultura occidental ha favorecido de forma exclusiva el desarrollo de este nivel en detrimento de los demás. 

ONDAS ALFA 

Las ondas alfa presentan una frecuencia más baja que las beta, oscilando entre 80.0 y 120.0 cps. Están relacionadas fundamentalmente con la relajación profunda y algunos estados de meditación. Durante la emisión de las ondas alfa la mente racional y los sentidos disminuyen su actividad, mientras que parte del potencial latente en el cerebro puede entrar en acción. Algunos de los efectos que produce el predominio de las ondas alfa son: 

• Experiencia placentera de descanso y ausencia de ansiedad y tensión. 
• Concentración sin esfuerzo. 
• Aumento de la creatividad. 
• En la frecuencia alfa puede captarse información que no es accesible a través de los órganos de la percepción. 
• Existe mayor capacidad y claridad para resolver los propios problemas. 
• Puede influir sobre funciones autónomas, como: el ritmo cardíaco, la circulación sanguínea, el umbral del dolor-placer, la función digestiva, la transpiración, la temperatura corporal, la resistencia de la piel etc. 

Al nivel de actividad alfa puede accederse voluntariamente a través de la relajación consciente y de la meditación. Desgraciadamente, es una posibilidad que ha sido desaprovechada durante mucho tiempo, lo que ha ocasionado el empobrecimiento psicológico y mental de muchos seres humanos. El nivel alfa es una dimensión inmensamente rica que toda persona interesada en su crecimiento personal debe de explotar y utilizar conscientemente. 

ONDAS THETA 

Las ondas theta tienen un ritmo más lento que las ondas alfa, oscilando entre 4.0 y 7.0 cps. Se manifiestan principalmente durante el sueño (con ensueño). Aparecen también en los estados de meditación profunda, intensa creatividad, en los fenómenos de percepción extrasensorial y bajo los efectos de la anestesia. 

ONDAS DELTA 

Las ondas delta tiene la frecuencia más baja y una amplitud alta. Son extremadamente lentas, oscilando entre 0.5 y 4.0 cps. Se manifiestan durante el sueño profundo. Si se consigue entrar y permanecer consciente en el nivel delta, se alcanza el estado de turiya (superconsciencia), que es el último peldaño de la meditación, donde desaparecen las barreras entre consciente, subconsciente e inconsciente. La mente opera de forma totalmente integrada. 

• Beta: ritmo cerebral de 13.0 – 30 cps; estado de conciencia de vigilia experimentado como conciencia externa. 
• Alfa: ritmo cerebral de 8 -12 cps; estado de conciencia de vigilia experimentado como conciencia interna y relajación profunda. 
• Theta: ritmo cerebral de 4 – 7 cps; estado de conciencia de sueño experimentado como sueños, visiones y sueño consciente. 
• Delta: ritmo cerebral 0.5 – 4 cps; estado de conciencia de sueño profundo experimentado como inconsciencia y conciencia homogénea. 

Las ondas cerebrales tienes también un voltaje o fuerza de la energía que se mide en microvoltios. El número de microvoltios está relacionado con la potencia de la fuerza mental. Los yoghis en estado de meditación registran un número elevado de voltios, mientras que en la actividad cerebral ordinaria es muy inferior. 

Los cuatro tipos de ondas cerebrales se manifiestan en el individuo de forma automática, según el estado mental en que se encuentre. En el nivel de vigilia aparecen las ondas beta, mientras que durante el sueño se produce la actividad de las ondas theta, y en el sueño profundo predominan las ondas delta. Las ondas alfa se manifiestan durante el transcurso del estado de vigilia al estado de sueño y se presentan ocasionalmente sobre todo en momentos de tranquilidad y sosiego. 
En el individuo común el paso de un tipo de onda cerebral a otro se sucede mecánicamente, permaneciendo fuera de su control el inducir voluntariamente las ondas de frecuencia más bajas (alfa y theta). Los yoguis bien entrenados acceden a los estados alfa y theta, lo que les permite manejar su mente subconsciente e influir sobre las funciones fisiológicas involuntarias que rige esta área de la mente. El yogui, valiéndose de la concentración y la meditación, bucea conscientemente en lo niveles alfa y theta, así descubre y aprovecha las inmensas posibilidades del potencias que yacen en su interior. No obstante, cualquier persona con un entrenamiento suficiente puede inducir progresivamente dichos niveles cerebrales, y desarrollarlos a voluntad. Como casi todas las cosas de la vida, es cuestión de aprendizaje y práctica.